Y las cicatrices a la tersura del alma sin costuras ni desgarros. Y los arrepentimientos por venir a la tranquilidad de ciertas elecciones, yo elijo y me quedo con eso, siempre hay que elegir cuando tomo algo, abandono todo lo demas que ese algo no es. Si elijo el camino izquierdo, desconoceré por siempre el derecho. Si decido ser ésta, entonces ya no seré aquella. Y siempre que me sea posible reivindicaré pese a todo, el arte que esconde el vuelo de una moneda, cuando una cara encierra toda tu vida y la otra absolutamente nada. Soy esto que ves,
imperfecta.
4 comentarios:
Si todas las imperfecciones de los demás fueran aceptadas con la valentía con que enfrentás las tuyas, muchas cosas serían diferentes en esta tierra.
Es un honor estar entre tus blogs invitados y otro honor leerte.
Un abrazo!
quélindoblog
y ojos!
jaja
Sigue de frente, sin mirar a los lados.
Disfrutando de tu PERFECTA imperfección...
Es la belleza del decidir. La incertidumbre de no tomar el camino incorrecto a cada paso. Hacer lo que uno hace, elegir lo que uno elige, decir lo que uno dice, refleja lo que uno en esencia es.
Lindísima reflexión. Y más linda tu honestidad, saludos.
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