lunes, 11 de agosto de 2008
Estoy cansada de todo, tan cansada como si hubiese subido corriendo 100 veces las escalinatas del Monumento ida y vuelta, agotada de la nada misma, algo sobre mi que me presiona para que no avance, algo que me dice NO PODES GUILLERMINA, no podes..No puedo dormirme, se llama dormirte a las 4 y despertarte a las 6.Querés ganarle al insomnio, y guardás esperanzas que tal vez, y sólo tal vez, durmiendo 4 horas a las 12 de la noche te dé sueño. Pero no funciona.Llega esa hora eterna en la que tratás de dormir y NO PODES. El reloj da vueltas, el cuarto da vueltas, VOS DAS VUELTAS, envolviéndote entre las sabanas, pero nada, seguís tan despierta como lo estabas a las 12, a la 1, las 2, las 3...Son las 4 de nuevo, y por algún extraño efecto lográs el sueño.De nuevo te levantás a las 8 y te envuelve una infinita paz, te olvidás tus sueños en la almohada y salís de la cama.Desayuno en la taza de mi gatita; esa droga denominada yogurt. Todos los días parecen domingo en el mismo departamento. La rutina, la misma de todos los dias: COLEGIO.El movimiento de las 7:20, caminar las 2 cuadras. Acelerar y desacelerar el ritmo de las piernas de acuerdo a la música que vas escuchando.Colgarte pensando en algo y darte cuenta que de alguna forma llegaste a tu destino, EL COLEGIO.Las mismas caras de todos los dias, algunas menos queribles que otras, pero hoy, HOY no quiero ver ninguna cara, NO QUIERO ESTAR ACA¿Cómo fue que estoy ahí si ni siquiera me acuerdo de haber recorrido esas cuadras? Mi último recuerdo se pierde en una esquina cualquiera.
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